Inicio / Activismo y Derechos Humanos / Vidas invisibles. Mujeres migrantes bajo el plástico

Vidas invisibles. Mujeres migrantes bajo el plástico

Almería, la ‘huerta del milagro europeo’ consta de 35 mil hectáreas bajo el plástico de agricultura intensiva, capaz de facturar en 5 meses más de 14 mil millones de euros gracias a 70 mil personas, en su mayoría migrantes, cuyas condiciones de vida y laborales son extremadamente precarias.

“Almería, la ‘huerta del milagro europeo’ consta de 35 mil hectáreas bajo el plástico de agricultura intensiva, capaz de facturar en 5 meses más de 14 mil millones de euros gracias a 70 mil personas, en su mayoría migrantes, cuyas condiciones de vida y laborales son ‘peores que en los campos de refugiados’, según el Relator de la ONU sobre derechos humanos y pobreza extrema”.

Así comienza el documental “Vidas invisibles. Mujeres migrantes bajo el plástico” que muestra, a través de la historia de Nora Elhaimer, una joven marroquí activista por los derechos de trabajadores agrícolas migrantes, cómo es la vida en el asentamiento de Níjar en el que, se calcula, viven 8000 personas.

El trabajo agrícola es sostenido en su mayoría por migrantes que son sometidos a condiciones de explotación. Quienes los explotan aprovechan la falta de papeles para privarlos de derechos como el acceso a un sueldo digno. En el caso de las mujeres, como Nora, la situación es todavía peor: a menudo son acosadas sexualmente y despedidas de su trabajo si se embarazan.

Encontrar un lugar para vivir es un gran problema para las personas migrantes. No se puede alquilar sin papeles, pero incluso para quienes los tienen es muy difícil acceder. Las ONG denuncian que existe una especie de “racismo inmobiliario”. Sin otra opción que la de los asentamientos, las condiciones de vida precarias se perpetúan y pasan de generación en generación.

«No podemos hacer nada, solo podemos aceptar lo que hay hasta que podamos arreglar nuestros papeles».

Nora Elhaimer, activista por los derechos de trabajadores agrícolas migrantes

Nora salió de Marruecos con la esperanza de ayudar a su madre y algún día poder llevarla consigo. Pero los años pasan y eso parece cada vez más difícil.

Según denunciaron organizaciones como “Almería acoge”, el Ayuntamiento de Níjar destruyó algunos de estos asentamientos con el objetivo de ocultar la situación en la que viven personas como Nora.

Pero, para los ojos dispuestos a ver, la realidad se impone con fuerza.

Documental realizado por Alianza por la Solidaridad y La Cosecha Producción Audiovisual, que narra la situación de extrema vulnerabilidad, precariedad, explotación laboral y de violación de derechos a la que se enfrentan las trabajadoras del campo que sobreviven en los asentamientos de Almería y las resistencias y lucha que llevan adelante.

El comunicado de las organizaciones

LAS ORGANIZACIONES SOCIALES DE LA MESA DEL TERCER SECTOR DE NÍJAR DENUNCIAN UN NUEVO DERRIBO SIN SOLUCIÓN EN UN ASENTAMIENTO DE NÍJAR

FEBRERO 9, 2024

Las organizaciones sociales de la Mesa del Tercer Sector constatamos que, en la mañana del jueves 8 de febrero de 2024, el Ayuntamiento de Níjar ha ejecutado la demolición de un asentamiento de infraviviendas de la localidad, concretamente uno de los situados en la Avenida Constitución, utilizando palas excavadoras y dejando sin solución habitacional digna a un total de 25 personas.

Según las informaciones contrastadas, a 17 de esas personas el Ayuntamiento les ha ofrecido el realojo provisional en un módulo prefabricado colectivo, en el que todavía hay más de una veintena de personas que fueron desalojadas del asentamiento del Walili hace ya más de un año. Las otras ocho personas se han desplazado a otros asentamientos.

Las organizaciones sociales denunciamos que nuevamente el Ayuntamiento de Níjar actúa sin ofrecer alternativas a estas personas, sin respetar sus derechos más básicos y desoyendo las recomendaciones de las organizaciones sociales. Desconocemos los motivos por los que el Ayuntamiento ha decido realizar el desalojo en estos momentos, cuando la alternativa propuesta (las viviendas de Los Grillos) aún no está lista para ser habitada, por lo que ha sido necesario emplear un realojo provisional.

En diversas reuniones con la Mesa del Tercer Sector, el gobierno municipal había manifestado su voluntad de cooperar con las entidades sociales y de abrir un cauce fluido de colaboración y diálogo para lograr una solución al problema de la infravivienda (un realojo previo al desalojo) que ponga en el centro los derechos de las personas y las alternativas habitacionales dignas. Sin embargo, la presente actuación se ha producido de manera unilateral y sin coordinación con los diversos actores del territorio.

Consideramos importante señalar que no comprendemos por qué, antes de poner en marcha las soluciones que puedan aportar esta inversión de dinero público, se continúa con desalojos de este tipo que repiten actuaciones políticas ya fracasadas anteriormente y que desalojos de este tipo solo contribuyen a incrementar el problema de exclusión y precariedad que viven estas personas, trabajadores y trabajadoras agrícolas y vecinos y vecinas de la zona, sobre las que hay que poner el foco para ofrecerles una solución, y no considerarles parte del problema.

En este sentido, la Mesa del Tercer Sector de Níjar elaboró, en noviembre de 2023, un documento titulado “Intervención social en asentamientos. Búsqueda de alternativas y erradicación de asentamientos en Níjar”, que se presentó y dialogó con el Ayuntamiento. Seguimos considerando que las propuestas allí indicadas deben marcar las pautas de actuación que, en este caso, no se han seguido de manera adecuada, en detrimento de los derechos y condiciones de las personas afectadas.

Reiteramos nuestra convicción de que un desalojo sin realojo digno no es un procedimiento aceptable para las personas afectadas ni una solución para esta vergonzosa situación que daña a quienes la padecen directamente, a la imagen de toda la provincia y al sector agrícola en particular.

En febrero de 2023 se desmanteló en Níjar (Almería) el asentamiento del Walili, uno de los asentamientos de migrantes más grandes y antiguos de la provincia. Allí vivían alrededor de 500 personas migrantes que trabajan en los campos e invernaderos de la zona.

Aldeaglobal 19 octubre, 2025

Querida mamá

La migración también separó a madres e hijos. La Fundación para la Integración Cultural de…